(Ciudad del Vaticano, 24 May. 2023). “En esta audiencia quiero presentales otro testigo del celo apostólico, esta vez nos llega de tierras lejanas. Efectivamente, san Andrés Kim Tae-gon fue el primer sacerdote mártir de Corea”, resaltó el Papa Francisco en la audiencia general de esta mañana en la Plaza de San Pedro, recordando que “hace doscientos años hubo en aquel país una fuerte persecución y no se podía confesar la fe abiertamente”.

“Destaco dos escenas que nos dan prueba de ese celo. En la primera, vemos a san Andrés ante la dificultad de no tener más opción que encontrar a los fieles en público y lograr reconocerse sin que nadie se diera cuenta, resumiendo en dos palabras su identidad. Las palabras que había que decir eran ‘discípulo de Jesús’”, subrayó el Papa, quien recalcó que “es muy interesante que sea este el resumen de todo lo que se puede decir”, pues “ya en ellas se supone dar vida al Evangelio y testimoniarlo”.

“En la segunda, lo encontramos cuando era seminarista caminando en la nieve para buscar un misionero y, completamente agotado, cayó por tierra, pero una mano amiga lo alzó y lo empujo a seguir adelante”, recordó Francisco, indicando que “la lección de esta escena es que aunque podamos caer, siempre podremos alzarnos de nuevo porque Jesús nos sostiene”.

Foto © Vatican Media