El Papa Francisco: “Nuestras ciudades a veces son desiertas de humanidad y sordas a la compasión. Escuchar el grito de los que sufren y hacerlo oír”

El Papa Francisco: “Nuestras ciudades a veces son desiertas de humanidad y sordas a la compasión. Escuchar el grito de los que sufren y hacerlo oír”

(Ciudad del Vaticano, 9 Feb. 2023). “Hacerse cercanos a los que sufren”, “dar voz a los sufrimientos que no son escuchados” y “convertirse en fermento de caridad” fueron las tres “actitudes importantes” indicadas por el Papa Francisco este mediodía durante la audiencia a una delegación de médicos y enfermos con motivo de la Jornada Mundial del Enfermo, que se celebra este sábado 11 de febrero.

“Recordemos ante todo lo importante que es estar cerca de los que sufren, ofreciéndoles escucha, amor y acogida”, indicó el Papa, quien pidió “dar voz al sufrimiento no escuchado de quienes, en su enfermedad, se quedan solos, carecen de apoyo económico y moral, se exponen fácilmente a la desesperación y a la pérdida de fe”.

“Lancemos un desafío a nuestras ciudades, a veces desiertas de humanidad y sordas a la compasión”, exhortó Francisco, quien reiteró su llamado a escuchar el grito de los que sufren y hacerlo oír, y explicó que “convertirse en fermento de caridad quiere decir ‘trabajar en red’”, compartiendo “un estilo de gratuidad y reciprocidad, porque todos somos necesitados y todos podemos dar y recibir algo, aunque sólo sea una sonrisa”.

Un comentario en «El Papa Francisco: “Nuestras ciudades a veces son desiertas de humanidad y sordas a la compasión. Escuchar el grito de los que sufren y hacerlo oír”»

  1. Dice el Santo Padre el Papa Francisco:» Lancemos un desafío a nuestras ciudades, a veces desiertas a la humanidad y sordas a la compasión «.
    Qué lamentable que en este mundo materialista en que se privilegia el tener al «Ser» nos olvidamos muchas veces de escuchar la voz de aquel que sufre en silencio, por el olvido de su familia o la sociedad en que estamos inmersos.Es una invitación para acercarnos a aquel ser humano que está enfermo y sufre la soledad, además, nos llama a qué trabajemos en red por el bien del otro
    . En algunas de las ciudades se ha perdido la esencia de lo humano, por ese motivo debemos rescatar todos los valores que nos engrandecen para acercarnos a Dios. No seamos sordos para atender el llamado de las personas que tanto lo necesitan, asistamos a hospitales, orfanatos y realicemos una labor social que llena el alma de amor y es gratificante ante los ojos de Dios. Esta misión es la única que nos enaltece para preparar el camino como peregrinos que somos en esta vida .
    Mi homenaje a los médicos y a todo el personal de salud quienes con su preparación y sacrificio dedican su vida para curar y salvar vidas. Dios recompense tan meritoria labor.

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