(Ciudad del Vaticano, 9 May. 2022). “La universidad es, o al menos debería ser, el lugar donde la mente se abre a los horizontes del saber, a los horizontes de la vida, del mundo, de la historia”, observó el Papa Francisco este mediodía en su discurso a los profesores y estudiantes de la Universidad de Macerata, Italia, a quienes recibió en audiencia en el Palacio Apostólico Vaticano.

Tras recordar que cada estudiante es “en sí mismo, un universo”, el Papa subrayó que en la universidad “se encuentran dos universos: el del mundo, del saber, y el del hombre”, pero “no del hombre genérico, que no existe, sino precisamente de esa persona, de ese joven, de esa joven, con su historia y su personalidad, sus sueños y sus cualidades intelectuales, morales y espirituales, y sus límites”.

“Cada persona es un universo, que solo Dios conoce plenamente, con un respeto inigualable”, recalcó Francisco, quien enfatizó que el reto de la universidad es reunir los dos horizontes, “el del mundo y el personal, para que dialoguen, y de este diálogo surja un crecimiento de humanidad”, un crecimiento, ante todo, “del mismo estudiante, que se forma, madura en el conocimiento y en la libertad, en la capacidad de pensar y actuar, de participar de una manera crítica y creativa en la vida social y civil, con su propia competencia cultural y profesional”.

“Este crecimiento humano de las personas sólo puede tener un reflejo positivo en la sociedad. Por tanto, invertir en la formación, en la escuela, en la universidad, es la mejor inversión para el futuro de un país. Lo sabemos, lo oímos repetir a menudo, pero no siempre se toman decisiones coherentes”, observó el Papa, quien insistió en la importancia de desarrollar una cultura del encuentro, recordando que el encuentro entre las diferentes culturas “no es automático”.

“No basta con reunir a profesores y estudiantes de diversas proveniencias”, sino que “es necesario madurar una cultura del encuentro”, y “la universidad es ciertamente un lugar privilegiado para hacerlo”, indicó Francisco. “¡Cuánta necesidad hay hoy en día, a todos los niveles, de seguir decididamente este camino, el camino del diálogo!”, recalcó el Papa.

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